Elecciones presidenciales en Argentina: Evaluación del impacto en el mercado de la salud

Por Mariana Romero Roy

El 10 de diciembre de 2023, Argentina experimentó un cambio político radical con la toma de posesión del presidente Javier Milei. Aunque el alcance de sus cambios políticos es aún incierto, sin duda tendrá repercusiones -tanto positivas como negativas- para el sector de la salud y las empresas que lo atienden.

A diferencia de los anteriores dirigentes argentinos, Milei es un presidente libertario que se presentó con una plataforma de reducción del gasto público e ideales de libre mercado. El 20 de diciembre, sólo 10 días después de asumir el cargo, anunció un paquete de medidas que buscan desregular la economía y reducir el gasto público en consonancia con estas políticas.

El estado de los cuidados de la salud en Argentina

El actual sistema de salud argentino es un sistema híbrido que ofrece una combinación de asistencia pública y privada:

• Sector público. El sector público es abierto y gratuito para toda la población, inclusive para los extranjeros. Es utilizado por la parte de la población que no tiene seguridad social, lo que corresponde al 39% de la población (unos 17,7 millones de personas).

• Seguridad social. El sistema de seguridad social está conformado por Obras Sociales Nacionales (OSN), el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) a jubilados y pensionados, las Obras Sociales Provinciales (OSP) y Otras Obras Sociales (OOS) que, en su conjunto, abarcan el 62% de la población y brindan cobertura a 28,6 millones de personas. Las obras sociales son manejadas por los sindicatos. La afiliación a las mismas, al igual que a los sindicatos, es compulsiva y obligatoria para todos los empleados registrados. Esta será una de las partes del sistema de salud que buscará modificar el nuevo gobierno.

• Asistencia privada. Las Empresas de Medicina Privada y Prepaga (EMPP) tienen como afiliados directos a aproximadamente el 5% de la población (aproximadamente 2,4 millones de personas). Sin embargo, al sumar a los trabajadores que “desregulan” los aportes de su obra social, derivándolos hacia este tipo de seguro de mayor calidad de atención y mucho más caro, alcanza al 14% de la población (6,3 millones de personas).

Posibles efectos de las políticas de Milei al sector de la salud

No resulta sorprendente que los expertos prevean que las perspectivas de Milei sobre el pequeño gobierno y el libre mercado repercutirán en el sistema de salud argentino, que dista mucho de ser perfecto. En los últimos años, factores como la pandemia, la inflación, el tipo de cambio del dólar y las barreras del gobierno a las importaciones han generado múltiples preocupaciones. En 2023, distintas asociaciones médicas de Argentina denunciaron la falta de insumos y la degradación de la calidad de la medicina.

A continuación se presentan algunas de las formas en que podría cambiar la los cuidados de a salud bajo la presidencia de Milei:

• Menos intervención gubernamental. Las empresas de medicina prepaga^[1] llevan mucho tiempo exigiendo libertad para aumentar sus valores a precios ajustados a la inflación. Sin embargo, las restricciones impuestas por el Gobierno se lo impiden. Milei busca destrabar todas estas barreras.

• Más control de precios para las aseguradoras.  En el caso de las prepagas y las obras sociales^[2], el primer gran cambio es que se liberan los precios. Hasta ahora las prepagas aumentaban sus cuotas a los afiliados cuando lo estipulaba el Ministerio de Salud o la Superintendencia de Servicios de Salud, con tope de aumentos. Las nuevas medidas les dan la libertad de aumentar los valores de sus servicios sin ningún tipo de restricción ni control.

• Mayor libertad individual para elegir aseguradoras. Otro cambio político que busca implementar Milei es la posibilidad de que los trabajadores transfieran directamente sus aportes a la seguridad social a una prepaga. Esto difiere del modelo actual, que hace mucho más difícil para los trabajadores transferir fondos de la seguridad social a un seguro privado. Esta última medida, que reduce el poder económico de las obras sociales, se espera que ofrecerá una gran resistencia, ya que la intención del Estado Nacional es hacerlas competir con las prepagas y, por lo tanto, se arriesgan a perder muchos afiliados que elegirán las prepagas porque son las que brindan servicios de mejor calidad. Aunque habría que ver si esto efectivamente se da así, cuando los valores de las prepagas aumenten considerablemente.

Cómo pueden reaccionar las empresas ante estos cambios

Para las empresas que suministran equipos u otros servicios al sector sanitario, algunos de los cambios propuestos por Milei podrían suponer buenas noticias en los próximos años. Podría reducir las regulaciones gubernamentales sobre las ventas, así como las restricciones gubernamentales sobre los precios.

Por otro lado, parte de la incertidumbre que inevitablemente conlleva el cambio también podría provocar fluctuaciones económicas mientras tanto. Como siempre, lo mejor es proceder con cautela:

• Prepararse para menos regulaciones gubernamentales. Las políticas propuestas por Milei están claramente dirigidas a reducir el control del gobierno sobre la economía, y esos cambios se aplicarían sin duda también al sector de la salud. Para las empresas que proporcionan equipos, suministros u otros servicios a dicho sector, esto podría significar menos trámites burocráticos o normativas gubernamentales a las que enfrentarse cuando trabajen con hospitales u otros proveedores de cuidados de salud.

• Esperar más libertad de precios. En el sistema de salud público de Argentina, los precios de los planes de seguro, los medicamentos y los tratamientos están estrechamente regulados. De hecho, muchos planes de seguros no pueden aumentar los precios sin la aprobación del gobierno. Esto podría cambiar con Milei. Un aspecto de los cuidados de la salud en Argentina, la venta de productos farmacéuticos, ya está empezando a cambiar. Por medio del DNU número 70/2023, el Gobierno autorizó la comercialización de medicamentos de venta libre en otros comercios que no sean farmacias. También habilita centros médicos y odontológicos en locales farmacéuticos y permite el ejercicio simultáneo de profesiones de odontólogo, médico y farmacéutico, al tiempo que bioquímicos pueden ser directores de laboratorios y farmacias. La Confederación Farmacéutica Argentina (COFA) ha expresado su oposición a esta medida.

• Buscar una posible expansión de la asistencia privada. Como se mencionó anteriormente, Milei tiene la intención de facilitar a las personas el uso de sus fondos de la seguridad social para un seguro de salud prepagado. En última instancia, esto podría hacer que más personas recurrieran a la asistencia privada, lo que podría dar lugar a una expansión de los hospitales, centros médicos y proveedores privados en Argentina.

• Adoptar la innovación. Dado que Milei es partidario de un enfoque más orientado al mercado de la economía, así como de los cuidados de la salud, esto puede fomentar a su vez la innovación y la integración de más tecnología en el sector sanitario. La administración de Milei podría dar prioridad a políticas que fomenten las inversiones del sector privado en investigación médica, adopción de tecnología y soluciones sanitarias digitales. Esto podría dar lugar a avances en la atención al paciente, el diagnóstico y una eficiencia general de la cuidados de la salud.

^[1] Se refiere a las empresas privadas que ofrecen cobertura de salud privada. A diferencia de una obra social, las prepagas brindan más beneficios a sus clientes, lo cual trae costos más elevados.

^[2] Se refiere a los fondos médicos manejados por los sindicatos.

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Consultados por GHI:
Guillermo Rodríguez Conte – Director de ReporteSud Consultores
Rubén Torres – Director de Políticas del Instituto de Política y Economía de la Salud
Daniela Chueke Perles – Periodista especializada en salud y sanidad